• Mi semana gastronómica

    Ensalada del Restaurante The Rose Bistro

    Estas navidades pasadas, comprando algunas viandas para las fiestas, en dos tiendas de alimentación se me acercaron los encargados y me preguntaron si yo era la ‘escritora de un blog de cocina en un periódico digital’. 

    Les comenté muy sorprendida que sí, que escribía un blog, pero que no se especializaba siempre en temas culinarios.  Aunque me encanta el tema.

    Se me volvió a despertar el gusanillo de ‘recetas y lugares’. Y esta semana, aprovechando que media España está además de congelada, a ‘régimen’, voy a ser muy pero que muy mala y voy a hablar de los sitios donde he estado degustando, ya sea comiendo, cenando o haciendo simplemente una paradeta para una tapa y/o tomar un  buen vinito en estos días de enero.

    Viernes noche

    Tenía ‘gusa’ (como dice mi hijo) de comida japonesa. Así que llamé a mi japonés de cerquita, ‘Yuqui + QSushi (ver aquí) y encargué una sopa wonton, tallarines con verdura y pollo, 3 gyozas de gambas (excepcionales) y diez piezas de sushi.  Ley cocina muy bien y su mujer Nieves siempre tan cariñosa.

    En diez minutos lo fui a buscar y lo degustamos en casa tranquilamente. Buenísimo y a un precio estupendo.

    No me resistí a hacer una foto a la vitrina del sushi recién elaborado.

    Restaurante Yuqui + QSushi

    Sábado mañana

    Mi visita semanal al Mercado. En esta ocasión al del Olivar. Fui a mi pescadería de confianza (Pescados Gracia, puestos 4BC-5ABC) donde Elvira, José Antonio y Cati siempre te atienden de maravilla, y te preparan el pescado listo para cocinar o congelar.

    Pescados Gracia, puestos 4BC-5ABC, Mercado del Olivar

    Allí también parada obligada en ‘Pink Salmón’ para sólo un pinchito y recargar baterías, pues la cola del pescado era inmensa, y como te quitan todo lo que yo llamo ‘porquerías internas’, tienes que esperar un poquito más, pero vale la pena.

    Pink Salmon en el Mercado del Olivar

    Sábado al mediodía

    Como no daba tiempo a cocinar, parada a tomar algo rápido y cerca de casa. Entre los que encontramos hueco, estaba el ‘Tapas’ del Paseo Mallorca (ver aquí). Sitio en la barra, bien atendidos y tres tapitas rápidas (tumbet con huevo frito, estupendas croquetas de jamón y unas mini hamburguesas, ah.... y un poco de ensaladilla) y vuelta a casa.


    El tapas del Flanigan

    Sábado noche

    Cena ligera para contrarestar el día. Una ensalada vegetal templadita y una de frutas en las que predominaban los fresones y las naranjas de Sóller que mi querida amiga Carmen me había traído expresamente para deleite de mi familia. Qué buenas!.  Y las mandarinas quizás de las mejores que he probado.

    Domingo a mediodía

    Habíamos quedado un grupo de buenos amigos para hacer una pequeña ‘excursión’ a Puigpunyent y comer en un restaurante recomendado por nuestra ‘gourmet’ preferida. Después la pobre no pudo ir con nosotros, debido a la dichosa gripe que están padeciendo miles de personas.

    Nos dirigimos hacia allí, tapados hasta las cejas, pues las previsiones del tiempo eran de tan ola de frío que hasta yo pregunté si nuestro coche tenía cadenas, ‘por si acaso’. Se rieron de mí, pero yo no le veo la gracia. Lo llamo más bien, ‘previsión’.

    El que no tenga carnet de conducir, no me tiene por qué conducir a ser una ‘temeraria e inconsciente’. ¿No es verdad?.

    Pero lo de las cadenas tuvo su jugo, pues ha servido para que se estuvieran carcajeando de menda lironda, pues lució hasta después de comer un sol precioso y las únicas nubes que vimos estaban lejísimos. 

    Allí llegamos al ‘Restaurante The Rose Bistro’ (ver aquí). El sitio nos gustó mucho y el servicio estupendo. 

    Pedimos un entrante de foigras muy rico y después todos, un buen plato de salchichas con patatas fritas, impresionantemente bien cocinadas y en su punto de fritura, ensalada, y salsitas. Yo disfruté tanto que me acabé el gran plato.

    Foigras del Restaurante The Rose Bistro

    De postre unos caseros buenísimos. Y el precio también muy pero que muy recomendable.

    Postre casero del Restaurante The Rose Bistro

    Domingo noche

    Caldito desgrasado y nada más. Había que compensar calorías.

    Lunes a media mañana

    El lunes tocaba mañana de médicos. Tengo un amigo que siempre me decía cuando yo era muy jovencita y no apreciaba sus ‘sentenciosas frases’, que a partir de los cuarenta, si te levantas y no te duele nada es que estás muerto.

    Pues un poco de razón tenía, pues además de las Inspecciones Técnicas de Vehículos, de Edificios de más de equis años, y otras, nos toca a partir de esas edades, lo que llamo la ITC, es decir la del ‘cuerpo’ sea serrano o no.

    Así que entre una y otra inspección o/y reparación, me acerqué a una cafetería que está en la calle Bonaire llamada ‘Fibonacci’.

    Para los que como yo no sabía exactamente quién era ese señor de nombre italiano, os diré que descubrió una sucesión infinita de números que comienza con los números 0 y 1, y a partir de éstos, el siguiente será el resultado de la suma de los dos anteriores, es decir, sería otra vez el 1, después el 2, el 3, 5, 8, 13, 21, 34………y ahí hasta el infinito.

    Me diréis algunos para qué sirve saber esto, es muy curiosa esa sucesión, pues por ejemplo jamás podréis ver una margarita natural que tenga seis pétalos, o cuatro, o nueve, ni una alcachofa o girasol, o en las piñas de los pinos piñoneros, etc, que tengan hojas o ramas que no sigan esa sucesión. Es muy interesante…… Bueno, al menos para mí. Ejem…

    Bueno pues allí me tomé como otras veces, una magnífica tostada de pan de cereales con tomate recién rallado, eso sí, con poco aceite (así lo pido expresamente) y estaba deliciosa. Acompañada de mi coca cola light de media mañana. La chica que te atiende es realmente encantadora. Y el precio no es caro.  Tienen fuera unos banquitos para los que son fumadores puedan tomar su desayuno o café con su cigarrillo favorito.

    Cafeteria Fibonacci

    Miércoles tarde

    Paso por Avenida Argentina y encuentro a una de las parejas jóvenes con más encanto de Mallorca. Allí están ellos en una Cafetería pequeñita llamada ‘Una +’, en donde me invitan a un vino. 

    El dueño viene con una tapa salmantina exquisita (una especie de barquita con ensaladilla dentro), y por lo que me dicen mis amigos, la otra noche se pararon y la tapa era un caldito del Bierzo que les entró en el estómago como agua de mayo. Yo les he dicho que tener un bar como ese con cositas tan ricas es como hacer a un pirómano, jefe de Bomberos. 

    Me gustan los sitios donde quienes lo llevan son de trato afectuoso, y son generosos con los clientes.

    Y bueno ya queda sólo el jueves por la noche.....
     
    Lo reservo para la torrada que la Asociación de Vecinos de Sant Jaume, presidida por Toya de la Vega, y que organiza cada año en la Plaza de Can Cavallería. 

    Allí nos reunimos los vecinos y no vecinos del barrio, además de obsequiarnos con un vinito buenísimo, se pueden asar las viandas y si no queremos molestarnos en llevarlas, llamando al 690826016 podemos encargar nuestro plato para torrar. 

    Si os animais también encontraréis mesas y sillas, el ambiente realmente es excelente. ¡Pasaros aunque sea a tomar un vinillo, a partir de las nueve!  Veréis qué ambientazo.  Eso si no llueve!.

    Aquí os pongo una foto del año pasado con unos amigos, todos bien abrigados, disfrutando de la noche.

    Torrada que la Asociación de Vecinos de Sant Jaume del 2016

    ¡¡Feliz Sant Sebastià a todos!! y bueno…..ya sabéis disfrutad de la buena mesa y el buen vino, con moderación…como lo he hecho yo esta semanita. Ni más ni menos.

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