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Ayer compré un libro y lo empecé. Se llama “El regreso del Catón”de Matilde Asensi.
Es una apuesta segura para mí pues creo que he leído todo lo que ha publicado y siempre he disfrutado con ello. Lo malo es que como me gusta leer por las noches, si el libro es bueno me dan las tantas y esta mañana tengo unas ojeras horribles que ni el corrector de ojeras ha podido arreglar. Soy tonta pues siempre pienso lo mismo, el corrector me queda plastoso y me hace arrugas. Mejor parecer ojerosa y que cuando me vean piensen que la noche anterior “he quemado la ciudad” a que piensen que cada día tengo más arrugas. Así que como he acabado el tubo pues creo que me he pasado con la dosis (iba poniendo y poniendo pues no veía los resultados)… ya no compro más correctores de ojeras ojerosas y que sea lo que Dios quiera!.
Es una apuesta segura para mí pues creo que he leído todo lo que ha publicado y siempre he disfrutado con ello. Lo malo es que como me gusta leer por las noches, si el libro es bueno me dan las tantas y esta mañana tengo unas ojeras horribles que ni el corrector de ojeras ha podido arreglar. Soy tonta pues siempre pienso lo mismo, el corrector me queda plastoso y me hace arrugas. Mejor parecer ojerosa y que cuando me vean piensen que la noche anterior “he quemado la ciudad” a que piensen que cada día tengo más arrugas. Así que como he acabado el tubo pues creo que me he pasado con la dosis (iba poniendo y poniendo pues no veía los resultados)… ya no compro más correctores de ojeras ojerosas y que sea lo que Dios quiera!.
El libro lo compré en una librería que es una preciosidad: “La librera del Savoy”.
No sé cómo se llama la dueña o la chica que lo lleva y apenas la conozco más que como clienta, pero siempre te atiende muy dulcemente y te ayuda en lo que necesites. Me recuerda a una película que me gustaba mucho que creo se llama “Tienes un email” en donde ella, Meg Ryan tenía una librería infantil que fundó su madre y puesta con un encanto extraordinario, pero que una multinacional al final puede con ella y tiene que cerrar. Por cierto con esta película que creo habré visto si no son diez son quince veces, siempre al final –y mira que lo intento evitar- me pongo a llorar cuando Meg Ryan está en el parque esperando a su cita sorpresa y aparece Tom Hanks y se oye el tema del Mago de Oz…… “Somewhere over the rainbow……”. Bueno.. pues eso me recuerda a esa película pues siempre que paso por la Librera del Savoy no veo a nadie o casi nadie comprando y no lo entiendo. Tendría que estar abarrotada.
Quizás sea que la gente ahora utiliza otros métodos de lectura. Tengo dos hermanos que han descubierto el eBook, es decir la versión digital o electrónica del libro y dicen que es comodísimo pero yo que soy una persona que intento adaptarme a los avances de todo tipo, no he querido este avance para mí. También tengo una amiga que dice que tiene un eBook de esos y que “baja” libros gratis. Dice que es como bajarse la música o una peli. Y yo le pregunté un día, ¿y de dónde se baja?, -al mismo tiempo que miraba hacia arriba; y ella se puso a reír de que mirara al cielo y creo recordar que lo más lindo que me dijo es que parecía del paleolítico. Yo no veo que tenga tanta gracia, pues hace poco me enteré que existían en internet, “nubes” y que ahí quedaba almacenada muchas cosas. Y digo yo: ¿dónde están las nubes?. En el cielo no?, pues cuando vuelva a ver a mi amiga le voy a discutir lo de mirar al cielo cuando se habla de “bajar algo de internet” y que a ver quién es del Cromañón o lo que me dijera y sobre todo le voy a decir que no está bien lo de “bajarse” libros gratis. Que se deje de bajadas y subidas y que compre libros o los pague en su eBook. Que si no nos quedaremos a este paso sin escritores.
Disfruto tanto con un tomo de un libro, sobre todo un libro a estrenar, el tacto del papel, el volver a una página anterior para recordar algo que te has olvidado, el ver cuánto te queda de libro, etcétera, que para mí es un auténtico placer tenerlo entre mis manos. Y además es como todo lo electrónico…. Y si no se “conecta” o lo que sea con la red que se tiene que conectar… y si no se descarga… y si te quedas sin batería. Ah!. Te quedas sin leer todo el viaje y encima a lo peor el avión viene con mucho retraso. En cambio… lo único que puede pasar con el libro es que sea un tocho muy gordo y un poco incómodo pero ahí está la solución que yo empleo. Me llevo otro libro más delgadito de los cuatro o cinco que tengo en la mesilla de noche. Y asunto solucionado.
Os recomiendo por tanto“El regreso del Catón”. Si sigue fiel a su línea, es un libro que aunque sea ficción los temas que aborda, (en este caso relacionado con Jesucristo) estarán muy documentados y rigurosos.
Gracias de nuevo por leerme y hasta la próxima.
